Los policías municipales hicieron sonar sus sirenas a modo de saludo y agradecimiento al vecindario, aprovechando la megafonía de sus vehículos dan ánimos y la enhorabuena a nuestro compañero Carlos.
Uno de los policías dio la lección más importante:
"Di muchas veces te quiero y sobre todo nunca, nunca, dejes de soñar".